La marca de un evento ha evolucionado desde
utilizar elementos gráficos como fuentes, colores y logotipo hasta tratar de
transmitir sentimientos y emociones. El branding es un compromiso con los
asistentes que habla sobre el objetivo del evento, lo que provoca unas expectativas
en la audiencia sobre el evento al que asistirá. Cuida el branding para
garantizar el éxito de tus eventos y las mantener buenas conexiones con tu
público.
Revisa estos
aspectos para que puedas hacer de este una herramienta eficiente y aprovechar
todo su potencial.
Usa el branding como herramienta poderosa y
efectiva para transmitir
Una de las
maneras más efectivas de comunicar es a través del branding. Por ello, debe
haber coherencia en todo lo que se dice y en los valores que transmite la
personalidad de la marca. personalice la experiencia de sus asistentes con diferentes acreditaciones para
cada categoría, incluya una agenda personalizada en la parte posterior, las
reglas de un desafío de evento o sus patrocinadores.
Como
resultado, la personalidad de la marca se ha convertido en una fuerza mucho más
poderosa para atraer a la audiencia a través de un mensaje coherente y en una
parte esencial para garantizar la experiencia del evento. Además, debes
reforzar tu marca y asegurar que la audiencia se sienta identificada con tus
valores para evitar que los asistentes dejen de tener interés en ti.
Revisa y renueva tu marca para diferenciar tu
evento del resto
Transmitir
valor en un evento se está convirtiendo en un factor clave en el retorno de la
inversión. Cuando la comunicación de los valores no es efectiva,
significa que necesitas actualizar tu marca. Hay algunos síntomas que indican
que debes renovarla: una desconexión de tu marca y tu propuesta de valores o un
estancamiento de la presencia de tu marca debido a un fallo en la comunicación
de los valores.
Siempre es
recomendable que el posicionamiento esté basado en tus valores y en un branding
específico del evento para que tus ventas incrementen.
A la hora de
decidir si la misión va a ser igual o distinta con respecto a la de la
organización principal dependerá del tipo de evento que organices. Por ello,
siempre que se trate de una reunión de empleados, la marca del evento debe de
ser reconocible y atribuible a la entidad base. Sin embargo, cuando se trata de
eventos de responsabilidad social corporativa la misión puede ser relativamente
independiente de la organización dominante.
Tu evento
tiene que tener una clara diferenciación con respecto al resto de eventos del
sector, para ello, representa tus valores a través de la marca y de mensajes
consistentes que dejen claro a tu audiencia lo que ofreces.
Si tu marca
y tus mensajes enfatizan la pertenencia de la compañía, pero no la experiencia
del asistente, hay una desconexión y una ineficiencia que provoca el
estancamiento de tu audiencia. Por lo tanto, para atraer a invitados tienes que
personificar la marca, los valores y la cultura ya que los asistentes requieren
una comunicación más humana para identificarse con la marca o el evento.
La
actualización de una marca requiere deliberación y reflexión sobre la
experiencia de los asistentes para hacer que se sientan cómodos con tu marca.
Mantén activa la marca de tu
evento para integrar al público
Lo primero es conocer y comprender a tu
público.
Crea una
propia identidad de marca independiente y toma una perspectiva empática para
aumentar el compromiso de la audiencia en tu evento.
Otro factor
que atrae a la audiencia es la promesa de la marca que está compuesta por
varios aspectos que debes tener en cuenta como, analizar los datos de
comportamiento anteriores, investigar tu demografía o cuidar el lenguaje
corporal con los invitados.
El principio
básico de cualquier marca debe ser la calidad constante para garantizar la
experiencia a los asistentes. Busca formas de suavizar los procesos y reducir
los tiempos de espera. Habla de quién eres, de tus intereses y de cuáles son
tus valores para definir tu evento. Sólo una vez que hayas atendido lo básico
podrás empezar a centrarte en la creación de una cultura compartida, aquella
que hace sentir únicos a tus clientes.
Orienta la
identidad de tu marca hacia la transmisión de tus valores teniendo en cuenta
las causas y preferencias que son importantes para tus asistentes, conseguirás
que todas tus comunicaciones sean consistentes y que ellos se sientan en un
grupo que comparte los mismos valores.